buceando por las fotos
jóvenes caras me observan
los veo y casi no los reconozco pero los quiero y los añoro.
algo tan difuso e inseguro como el futuro,
se creían afortunados,
intocables.¿Te acuerdas ?
buscábamos otras cosas, otros fines
leyendo en voz alta los poemas de Bob Dylan,
marcándonos para siempre y por siempre. Y
con la voz del maestro
el tiempo se parase en ese momento y
un nuevo día que aparecía con la llegada de la noche.
Tres almas jóvenes
para siempre como tesoro intemporal,
algo casi mágico,
consigue hacerme recordar que hubo un tiempo en el que rozamos la inmortalidad,
con tu voz suave diciendo:
Bendigo el día en que te encontré
quiero mis manos a tu alrededor
y así rogarte: deja que sea yo.
quiero mis manos a tu alrededor
y así rogarte: deja que sea yo.
No te lleves este cielo de alguien
si tienes que abrazarte a alguien
ahora y siempre, deja que sea yo.
si tienes que abrazarte a alguien
ahora y siempre, deja que sea yo.
Cada momento que nos encontramos, amor
encuentro un amor completo
sin tu dulce amor, ¿qué vida sería?
encuentro un amor completo
sin tu dulce amor, ¿qué vida sería?
Así que nunca me dejes solo
dime que tú sólo me amas a mí
y di que siempre dejarás que sea yo.
dime que tú sólo me amas a mí
y di que siempre dejarás que sea yo.
É bonito ter esos recordos, non hai cartos que o pague... aqueles tempos no que a única preocupación era quedar para mañá porque o de hoxe sabía a pouco. Qué tempos!
ResponderEliminar...podería ser hoxe
ResponderEliminarSempre pensamos que os tempos pasados foron mellores, pero non é realmente así en xeral. Hai pequenos tesouros na cabeza que si son especiais e eses son os que vale a pena conservar.
ResponderEliminarQue tempos, pero unha praia, unha posta de sol, unas cervexas e boa compañía están por aquí... só hai que querer...